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La información de esta sección está dirigida exclusivamente al profesional sanitario residente en España facultado para prescribir o dispensar medicamentos, puesto que se requiere una formación especializada para su correcta interpretación.
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La cirugía de cerebro siempre presupone algún riesgo, pero las derivaciones se han utilizado durante más de 50 años para tratar la hidrocefalia. Generalmente, un neurocirujano coloca la derivación en menos de una hora. La mayoría de las personas vuelve a su hogar en menos de una semana después de la cirugía.
Pruebas diagnósticas
Para determinar si una derivación es lo indicado para ti o para un familiar, tu equipo de atención de la salud recurrirá a una variedad de pruebas diagnósticas posibles. Más
Cirugía: ¿Qué esperar?
Tu equipo de atención de la salud te guiará durante el proceso quirúrgico, que incluye pasos importantes antes, durante y después del procedimiento de implantación de una derivación. Más
Para determinar si una derivación es lo indicado para ti o para un familiar, tu neurocirujano recurrirá a una variedad de pruebas diagnósticas posibles. También tendrá en cuenta cualquier otra patología presente.
Procedimientos diagnósticos
Existen varias pruebas diagnósticas que pueden ayudar a diagnosticar la hidrocefalia. Estos mismos estudios también pueden ayudar a evaluar la derivación en caso de que se produzca una disfunción o una infección.
Ultrasonido
Es un método sofisticado para perfilar las estructuras dentro de la cabeza mediante ondas sonoras de alta frecuencia. El ultrasonido solo se puede utilizar en niños cuya fontanela esté abierta, ya que, de lo contrario, el cráneo obstruye las ondas sonoras.
Tomografía computarizada
La tomografía computarizada (TC) utiliza haces diminutos de rayos X para perfilar el cráneo, el cerebro y los ventrículos. Además de visualizar el tamaño y la forma de los ventrículos, se pueden ver anomalías como tumores, quistes y otras patologías.
Resonancia magnética
La resonancia magnética (IRM) es una herramienta de diagnóstico no invasiva que utiliza señales de radio y un imán para formar imágenes computarizadas del cerebro y de los ventrículos.
Cisternografía
La cisternografía es una prueba que requiere la inyección de una pequeña cantidad de material radioactivo en el líquido cefalorraquídeo. La cisternografía diferencia la hidrocefalia comunicante de la obstructiva y determina el flujo del líquido cefalorraquídeo.
Angiografía
La angiografía es una técnica especializada en la que se inyecta “material de contraste” en las arterias que llevan sangre al cerebro. Con esta técnica, se pueden detectar problemas en vasos sanguíneos anómalos y lesiones patológicas.
Pruebas neuropsicológicas
Esta serie de preguntas y respuestas ayuda al equipo de atención de la salud a determinar si la hidrocefalia está causando una disminución en el funcionamiento del cerebro.
Prueba de infusión lumbar
Mediante esta técnica especializada, se inyecta el líquido a la zona lumbar de la columna. Este procedimiento se utiliza para personas con hidrocefalia de presión normal para determinar su capacidad de absorción de líquido cefalorraquídeo.
Drenaje lumbar controlado
Es una técnica utilizada para el drenaje externo de líquido cefalorraquídeo. La prueba se utiliza para determinar si una persona con hidrocefalia de presión normal mejorará si se le implanta una derivación.
Cirugía: Qué esperar: Implantación de una derivación ventriculoperitoneal (VP)
Tu neurocirujano repasará contigo el proceso quirúrgico de implantación de una derivación, que incluye pasos importantes antes, durante y después del procedimiento.
Antes del procedimiento
Para ayudar a prevenir una infección, es posible que tengan que rasurarte una parte de la cabeza. Tu equipo de atención de la salud te lavará la cabeza y el cuerpo con un jabón especial.
Tu neurocirujano se asegurará de que entiendas el procedimiento y contestará cualquier pregunta que puedas tener.
Durante el procedimiento
El equipo de neurocirugía realiza la cirugía en el quirófano en condiciones estériles, con anestesia general. La operación generalmente dura menos de una hora. Por lo general, la operación incluye los siguientes pasos:
Se realiza una pequeña incisión en el cuero cabelludo. Luego se realiza una pequeña perforación en el cráneo.
Se realiza una apertura diminuta en los recubrimientos protectores del cerebro. Estas aperturas facilitan la colocación del catéter en el ventrículo lateral.
El neurocirujano realiza dos o tres pequeñas incisiones para colocar la válvula de derivación (generalmente por encima o detrás de la oreja).
El catéter se introducirá debajo de la piel.
El extremo del catéter se colocará cuidadosamente en la cavidad receptora adecuada (generalmente el abdomen).
Después de la operación, se colocan unas pequeñas vendas estériles en cada incisión.
Después del procedimiento
Inmediatamente después de la cirugía, te llevarán a la sala de recuperación. Te quedarás allí para una observación minuciosa durante aproximadamente una hora y después te llevarán a su sala. La mayoría de los pacientes dejan el hospital en un período de entre 2 y 7 días, según su progreso.
Aunque este es el procedimiento habitual para colocar una derivación, cada persona puede tener una experiencia ligeramente diferente, de acuerdo con su neurocirujano, el hospital y sus necesidades médicas particulares.
